Represión en Siria

Diez personas -como mínimo- han muerto y varias decenas han resultado heridas este viernes en Siria como consecuencia de la brutal represión de las manifestaciones. Es lo que asegura la agrupación opositorio Sham, que ha detallado que 4 manifestantes han perdido la vida en la localidad de Ariha, cerca de Yisr al Shugur, ciudad en la que han irrumpido fuerzas del Ejército. Esta organización ha informado también de que 7 personas han muerto en Damasco, en Latakia (al noroeste del país) y en Basr al Harir, al sur de la capital. En total se calcula que unas 1.300 personas han muerto desde que empezaron las manifestaciones pidiendo cambios en el Gobierno de Bachar al Asad. Otras formaciones de la oposición, como La Revolución Siria o Flash han denunciado también estas muertes.

La televisión estatal siria, sin embargo, ha afirmado que miembros de las fuerzas de seguridad han muerto en un ataque de grupos terroristas armados. Además, ha justificado el asalto a la ciudad norteña de Yisr al Shugur diciendo que era una operación para "restaurar la seguridad" en la localidad y en las zonas próximas. "El Ejército árabe sirio ha empezado esta mañana su misión nacional en Yisr al Shugur, donde la gente sufre la intimidación de grupos armados", ha contado. Según la versión oficial, estos "grupos armados" controlan la localidad y han levantado defensas para impedir el paso de las tropas, que comenzaron a concentrarse el pasado martes.

El número de refugiados sirios que han cruzado la frontera con Turquía hasta este viernes se eleva ya a unos 3.000, según fuentes oficiales turcas. La mayoría procede precisamente de la localidad fronteriza de Yisr al Shugur tras difundirse la noticia de que el Ejército se preparaba para asaltar esa urbe, a la que Damasco responsabiliza de la muerte de 120 policías el 6 de junio. El Ministerio de Exteriores de Turquía ha instalado un centro de atención a los refugiados y las autoridades turcas han depositado 370.000 euros para atender las necesidades más urgentes de estas personas. La agencia semioficial Anadolu estima que la mayoría de los sirios que han entrado en Turquía desde el lunes son ancianos, mujeres y niños para los que se han habilitado dos campamentos. Las autoridades turcas han tomado medidas para prevenir que se infiltren rebeldes kurdos entre los refugiados, mediante el control de los documentos de identidad.

Por su parte, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha calificado la situación en Siria como "una brutalidad" y ha acusado al régimen sirio de actuar de forma inhumana. En una entrevista concedida al canal privado de televisión ATV, el primer ministro turco ha señalado que habló hace tres días con el presidente sirio, Bachar al Asad. "No se están portando de forma humana. Esto es brutalidad", ha sentenciado Erdogan en referencia a los más de mil de muertos que ha causado ya la revuelta popular en Siria. "Le dije abiertamente todo eso. Pero ellos subestiman estos asuntos. Y al nivel humanitario nos cuentan cosas diferentes", ha explicado Erdogan, quien ha reiterado que Turquía no cerrará sus puertas a los refugiados sirios.

El líder turco también ha acusado a Mahir al Asad, hermano del presidente, de ser el responsable directo de los actos violentos que se viven en ese país árabe. Además, ha manifestado que los incidentes en Siria no son comparables con Libia desde el punto de vista turco, ya que en el país vecino viven muchos ciudadanos que tienen familiares turcos, por lo que se trata casi de "un asunto interno de Turquía".

¿Y a qué viene hoy esta entrada sobre Siria en mi blog? Muy sencillo. En 2004 tuve la oportunidad de visitar este bonito y desconocido país durante 16 días y, aunque caímos en él de refilón ya que no era nuestra elección preferida, tuvimos la gran suerte de conocer su cultura, sus gentes, su hospitalidad, su sencillez... ¡tantas cosas! Es por eso que guardo un grato recuerdo. Podías salir por las calles de Damasco o de cualquier otra ciudad sin ningún problema, nadie te paraba a darte el coñazo, sólo a echarte una mano si tenías algún problema. El pueblo sirio es muy abierto y te preguntaban de dónde eras... y casi siempre alguien tenía algún pariente o conocido que había venido a probar suerte en España. Recuerdo en Latakia, uno que me dijo que tenía un hermano en Zaragoza y que él también quería venirse a España... Así que todo esto que está ocurriendo en Siria me sobrepasa. No entiendo como un gobernante de un país dispare indiscriminadamente contra su propio pueblo, sólo para mantenerse en el poder... ¡Es increíble! Veo las imágenes de los ataques, de los muertos, de las manifestaciones... en las ciudades que visité, y me parece que es una pesadilla... ¿Y dónde está la ayuda internacional? Mutismo generalizado... Ya despertarán algún día; espero que no sea ya tarde.

¡Todo mi apoyo al pueblo sirio!